Croquetas de papas y queso de cabra

La croqueta parece ser un aporte culinario de nuestros vecinos del otro lado de los Pirineos, los franceses, aunque es muy popular en  toda España por ser un plato típicamente casero. A partir del siglo pasado, las croquetas se elaboraban para aprovechar la carne que sobraba de los pucheros y estofados, hoy en día es innumerable la cantidad de ingredientes, tanto vegetales, quesos, cárnicos, etc.

En  nuestras tierras se puede comer como acompañamiento, plato principal y popularmente en la barra de un güachinche como una suculenta tapa que se puede degustar fácilmente con las manos. En este caso, la de papas y queso de cabra es muy popular en las Islas Occidentales.

Ingredientes:

200 g de queso de cabra tierno, (mejor si es majorero)

25 gramos de queso rallado (para guarnición)

Un vasito de leche.

2 huevos, una cuchara grandita de mantequilla.

250 g de papas.

Harina blanca.

Pan rallado, aceite de oliva y  sal marina.

Elaboración:
Las papas se lavan bien y se ponen a guisar sin pelar, en agua hirviendo, con una hoja de laurel y sal, hasta que al pincharlas con un tenedor éste entre con facilidad. Ya guisadas, se pelan y se aplastan con un tenedor, hasta conseguir un puré, se reserva un poco de este puré, para la guarnición. Se añade la mantequilla, la sal y el queso picadito y se trabaja con ayuda de una cuchara de madera hasta que la masa esté homogénea. A continuación, se añaden dos yemas y, una vez unida, se incorporan dos claras a punto de nieve, cuidando que no se bajen muy rápido. Se deja reposar la masa durante dos horas. Se va dando forma a las croquetas, redondas ó alargadas y se pasan por pan rallado, huevo batido y de nuevo por pan rallado. Se fríen en aceite bien caliente, hasta que estén doradas. Se sirven acompañadas de puré de papas espolvoreado con queso rallado.